Calderón pide olvidar resentimientos y construir una relación de respeto
Redactor: Sam Torne
En un evento reciente organizado por la Fundación Neos y la Asociación Empresarial México-España, el expresidente mexicano Felipe Calderón Hinojosa enfatizó la importancia de dejar atrás los resentimientos históricos derivados de la Conquista para fortalecer las relaciones entre México y España. Calderón subrayó que ambos países no pueden construir un futuro próspero si permanecen «anclados en la sombra de los resentimientos».
Durante su intervención, Calderón destacó que las diferencias surgidas del encuentro entre dos culturas poderosas deben servir para enriquecer a ambas naciones, promoviendo una convivencia plural y un entendimiento mutuo. Hizo un llamado a la hermandad, al entendimiento y a la reconciliación, afirmando que «nuestras diferencias no nos separan, sino que nos enriquecen como naciones».
Orgullo por raíces mixtas y reconocimiento histórico
El exmandatario expresó su orgullo por sus raíces indígenas y españolas, mencionando su ascendencia purépecha por parte de su bisabuela y la integración de un antepasado criollo en la familia Villaseñor, fundadores de Valladolid (hoy Morelia). Resaltó que los purépechas fueron la única civilización que nunca fue dominada por los mexicas, lo que refleja la fortaleza y resistencia de sus ancestros indígenas.
Calderón también reconoció los excesos cometidos durante la Conquista, citando el caso de Nuño de Guzmán en Morelia, quien fue destituido por la reina Isabel y reemplazado por Vasco de Quiroga. Este último implementó proyectos fundacionales para mejorar el bienestar de las comunidades indígenas, construyendo hospitales que funcionaban como casas comunales y enseñando oficios a las comunidades para fomentar su prosperidad.
Superar el pasado para construir el futuro
El expresidente enfatizó que ningún mexicano ni español del siglo XXI puede ser culpado por eventos ocurridos hace siglos. Instó a ambas naciones a mirar hacia el futuro, construyendo una relación basada en el respeto mutuo y la colaboración. Calderón concluyó que, como una sola entidad, México y España pueden construir un puente que conecte no solo sus tierras, sino también sus corazones, promoviendo un futuro compartido y próspero.
Este llamado a la reconciliación y al entendimiento mutuo se da en un contexto donde las relaciones entre México y España han enfrentado tensiones debido a solicitudes de disculpas por la Conquista. Sin embargo, figuras como Calderón abogan por dejar atrás estos resentimientos históricos y enfocarse en fortalecer los lazos culturales, económicos y sociales que unen a ambas naciones.
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