El FMI pide ajustes fiscales en México: Claves para entender las proyecciones económicas
Redactor: Sam Torne
El Fondo Monetario Internacional (FMI) ha reducido sus expectativas de crecimiento económico para México en 2024 y 2025. Según su informe de Perspectivas Económicas Globales, el Producto Interno Bruto (PIB) mexicano crecerá un 1.5% en 2024, siete décimas menos que su pronóstico anterior, y un 1.3% en 2025, tres décimas por debajo de la previsión inicial. Esta desaceleración refleja retos significativos en la economía nacional.
El organismo atribuye este ajuste a factores como una política monetaria restrictiva, limitaciones en la capacidad productiva y la dependencia comercial con Estados Unidos, cuya economía también enfrenta riesgos de desaceleración.
Recomendaciones del FMI
El FMI recomienda al gobierno de Claudia Sheinbaum, quien asumió la presidencia en octubre de 2024, adoptar una estrategia fiscal a mediano plazo para reducir el déficit y la deuda pública. Asimismo, insta a aumentar los ingresos fiscales con el fin de financiar inversiones clave en infraestructura y capital humano.
Un punto destacado es el potencial del nearshoring, o relocalización de cadenas de suministro cerca de los mercados finales. México tiene una oportunidad única de capitalizar este fenómeno para atraer inversiones y fomentar el crecimiento económico.
Desafíos para la economía mexicana
Aunque México tiene oportunidades relevantes, enfrenta múltiples retos. Entre ellos, la inflación ha sido difícil de controlar debido al aumento de los salarios en el sector servicios. Además, la posible desaceleración de la economía estadounidense podría impactar negativamente en las exportaciones mexicanas.
Otro tema que podría influir en la percepción de los inversionistas es la incertidumbre generada por las recientes reformas judiciales, que podrían modificar el entorno regulatorio y de negocios en el país.
Comparación regional
En el contexto latinoamericano, México muestra un desempeño económico moderado en comparación con otros países de la región. Brasil y Perú tienen proyecciones de crecimiento del 3% para 2024, mientras que Chile podría alcanzar un 2.5%. Argentina, por otro lado, continúa en una recesión económica prolongada.
La región, en general, proyecta un crecimiento del 2.2% en 2023, con una mejora esperada para 2025, aunque algunos países enfrentan retos similares a los de México, como la inflación y la incertidumbre política.
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