Redactor: Sam Torne
En una operación sin precedentes, el gobierno mexicano extraditó a 29 líderes del narcotráfico a Estados Unidos, incluyendo a figuras prominentes como Rafael Caro Quintero y los hermanos Miguel Ángel y Omar Treviño Morales. Esta acción se produce en medio de tensiones comerciales entre ambos países y representa un esfuerzo significativo de cooperación en la lucha contra el crimen organizado.
La operación, llevada a cabo con total hermetismo, implicó el traslado de los detenidos desde diversas cárceles mexicanas hacia Estados Unidos. El proceso fue coordinado por las secretarías de la Defensa Nacional y de Seguridad y Protección Ciudadana, utilizando aeronaves para movilizar a los reclusos desde penales en diferentes estados del país. Los vuelos partieron desde la terminal aérea militar de Santa Lucía hacia diversas ciudades estadounidenses, incluyendo Nueva York, Houston y Washington D.C.
Figuras clave extraditadas
Entre los extraditados destacan:
- Rafael Caro Quintero: fundador del extinto Cártel de Guadalajara, es acusado del asesinato del agente de la DEA Enrique «Kiki» Camarena en 1985. Tras su captura en 2022, su extradición cumple una demanda histórica de las autoridades estadounidenses.
- Miguel Ángel y Omar Treviño Morales: conocidos como «Z-40» y «Z-42» respectivamente, fueron líderes del cártel de Los Zetas, implicados en múltiples actos de violencia y tráfico de drogas. Ambos enfrentan cargos en cortes estadounidenses por sus actividades criminales.
- Antonio Oseguera Cervantes: Hermano de Nemesio Oseguera Cervantes, líder del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG). Su captura y extradición representan un golpe significativo para esta organización criminal.
Esta masiva extradición ocurre en un momento de crecientes tensiones entre México y Estados Unidos. El presidente estadounidense, Donald Trump, ha amenazado con imponer un arancel del 25% a las importaciones mexicanas si no se intensifican los esfuerzos contra el narcotráfico y la migración ilegal.
En respuesta, la administración de la presidenta Claudia Sheinbaum ha intensificado las acciones contra el crimen organizado, buscando demostrar su compromiso en la lucha contra el narcotráfico y evitar las sanciones económicas.
La Administración de Control de Drogas (DEA) de Estados Unidos ha elogiado la cooperación del gobierno mexicano en estas extradiciones, considerando especialmente significativa la entrega de Caro Quintero, quien había eludido la justicia estadounidense durante décadas. Sin embargo, expertos advierten que estas acciones podrían desencadenar represalias por parte de las organizaciones criminales, aumentando la violencia en ciertas regiones de México.
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