Redactor: Sam Torne
En un contexto de crecientes tensiones y discursos beligerantes, un grupo de congresistas estadounidenses ha tomado una postura firme en defensa de la soberanía mexicana. Encabezados por Joaquín Castro, Jesús «Chuy» García y Nydia Velázquez, han presentado una resolución que rechaza cualquier acción militar unilateral de Estados Unidos en territorio mexicano sin la debida autorización del Congreso y el consentimiento del gobierno de México.
La iniciativa surge como respuesta a recientes declaraciones de figuras políticas que han sugerido la posibilidad de intervenciones militares en México para combatir a los cárteles de la droga. Estas propuestas han generado preocupación debido a las posibles repercusiones en la relación bilateral y la estabilidad regional. Los congresistas consideran que tales acciones podrían desatar conflictos mortales en las comunidades fronterizas y afectar negativamente a miles de ciudadanos que dependen del comercio transfronterizo legítimo.
Yahoo Noticias
Declaraciones de los congresistas
El congresista Joaquín Castro enfatizó la importancia de respetar la soberanía de México y advirtió sobre los peligros de una guerra en la frontera sur. Por su parte, Jesús «Chuy» García destacó que una invasión podría desestabilizar la región, beneficiando a los cárteles y provocando desplazamientos masivos de personas. Nydia Velázquez calificó de imprudentes las amenazas a la soberanía mexicana, subrayando que una acción militar unilateral no solo violaría la Constitución estadounidense, sino que también pondría en riesgo a militares y civiles.
Respaldo y repercusiones
La resolución ha recibido el respaldo de diversas organizaciones, incluyendo el Comité de Servicio de los Amigos Americanos y el Centro Brennan para la Justicia, entre otros. Estas entidades coinciden en que una acción militar sin el debido proceso legal podría tener consecuencias devastadoras para ambos países.
Además, la iniciativa busca enviar un mensaje claro de que el Congreso de Estados Unidos respeta la soberanía de México y rechaza cualquier intento de intervención armada sin el consentimiento adecuado. Esta postura es crucial para mantener relaciones diplomáticas saludables y cooperativas entre ambas naciones.
La presentación de esta resolución refleja una división en la política estadounidense respecto a cómo abordar la problemática del narcotráfico y la seguridad fronteriza. Mientras algunos abogan por medidas más agresivas, otros promueven la colaboración y el respeto mutuo como pilares fundamentales de la política exterior. Este debate podría influir en futuras decisiones y estrategias en la región.
