Redactor: Sam Torne
La reciente imposición de aranceles por parte del presidente estadounidense Donald Trump ha desencadenado una oleada de reacciones a nivel mundial. Según Kevin Hassett, director del Consejo Económico Nacional de la Casa Blanca, más de 50 países han contactado a Estados Unidos para iniciar negociaciones en respuesta a estas medidas comerciales.
El 2 de abril, en lo que el presidente Trump denominó el “Día de la Liberación”, se anunció un arancel global del 10% sobre todas las importaciones, con aranceles adicionales más elevados para ciertos países. Estas tarifas entraron en vigor el 5 de abril, afectando a socios comerciales clave y generando preocupación por una posible guerra comercial a gran escala.
La reacción de los mercados financieros fue inmediata y contundente. Las bolsas de valores de Asia y Europa registraron caídas significativas, reflejando el temor de los inversores a una desaceleración económica mundial. En Estados Unidos, los futuros del S&P 500 y el Dow Jones también mostraron descensos notables antes de la apertura del mercado.
AP News
Respuesta internacional y negociaciones en curso
Ante la magnitud de las medidas arancelarias, numerosos países han expresado su intención de negociar con Estados Unidos para mitigar el impacto en sus economías. Hassett afirmó que «más de 50 países han contactado al presidente para iniciar una negociación». Sin embargo, algunos líderes mundiales han calificado los aranceles como «injustificados» y han advertido sobre posibles represalias, lo que podría intensificar las tensiones comerciales.
Es notable que países aliados tradicionales, como Canadá y México, también se han visto afectados por estas medidas. Aunque inicialmente quedaron exentos de algunos aranceles, la incertidumbre en torno a las políticas comerciales ha generado inquietud en estos socios norteamericanos.
La comunidad económica ha manifestado preocupación por las posibles consecuencias de los aranceles. Jerome Powell, presidente de la Reserva Federal de Estados Unidos, advirtió que estas medidas podrían conducir a un aumento de la inflación y a una desaceleración del crecimiento económico. Powell señaló que «los aranceles más grandes de lo esperado probablemente aumentarán la inflación y ralentizarán el crecimiento».
