Redactor: Sam Torne
La presidenta Claudia Sheinbaum firmó el decreto que incorpora la «igualdad sustantiva» de las mujeres en la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, marcando un paso en la lucha por la equidad de género. Este acto, realizado en su conferencia de prensa, simboliza el compromiso del Estado con la erradicación de desigualdades históricas que han afectado a las mujeres.
La igualdad sustantiva va más allá de la igualdad formal, que se limita a reconocer derechos. Se centra en garantizar que las mujeres puedan ejercer esos derechos en igualdad de condiciones, abordando las barreras estructurales que han perpetuado la discriminación. Este enfoque busca nivelar el terreno de juego en aspectos como el acceso a la educación, la justicia, la seguridad y el empleo.
La presidenta Sheinbaum destacó la relevancia de esta reforma al afirmar:
«Hoy, las mujeres ya estamos en la Constitución, y con ello, nuestros derechos quedan plenamente garantizados. Reconocemos la desigualdad histórica y trabajamos para abrir todos los espacios necesarios para superarla»
Reformas Constitucionales Clave
El decreto implica la modificación de siete artículos de la Constitución: 4, 21, 41, 73, 116, 122 y 123. Estas reformas tocan temas esenciales:
- Derecho a una Vida Libre de Violencia: Establece obligaciones reforzadas para proteger a mujeres, niñas y adolescentes.
- Paridad de Género: Obliga a una representación equitativa en todos los niveles de la administración pública.
- Erradicación de la Brecha Salarial: Garantiza la igualdad de remuneración entre hombres y mujeres.
- Perspectiva de Género en Seguridad y Justicia: Incorpora este enfoque en las acciones de seguridad pública y decisiones judiciales.
Reacciones de las Líderes Políticas
Durante la firma, Sheinbaum estuvo acompañada por figuras clave como Citlalli Hernández, secretaria de las Mujeres, y la senadora Malú Mícher, quien expresó su satisfacción tras años de promover una agenda feminista.
«Este decreto es el resultado de décadas de lucha. Hemos insistido en que la igualdad sustantiva debe ser una realidad, no solo un ideal en el papel».
Por su parte, la diputada Anaís Burgos enfatizó la importancia de esta reforma para las generaciones futuras:
«Garantizar un presente y un futuro seguro para nuestras niñas y adolescentes es el mayor legado que podemos dejar».
Aunque la reforma ya es ley, su implementación requerirá la creación y modificación de leyes secundarias. Estas normativas serán esenciales para asegurar que las nuevas disposiciones constitucionales se reflejen en la práctica. Las instituciones a nivel federal y local tendrán la responsabilidad de garantizar que las políticas públicas se alineen con estos principios.
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