Redacción: Inés Arroyo
Un equipo de la Universidad Estatal de Ohio ha logrado un avance significativo en el campo de la realidad virtual (RV), desarrollando una tecnología que incorpora el gusto en las experiencias inmersivas. Este sistema, denominado e-Taste, permite simular sabores en el mundo virtual, utilizando sensores y dispensadores químicos inalámbricos para crear la sensación del gusto de manera remota.
El dispositivo e-Taste funciona reconociendo moléculas que representan los cinco sabores básicos: dulce, ácido, salado, amargo y umami. Estas moléculas son captadas por sensores y luego enviadas a un dispositivo que reproduce la sensación gustativa en el usuario. Este proceso ofrece una nueva forma de interacción, complementando los estímulos visuales y auditivos tradicionales en la realidad virtual.
El sistema, desarrollado por el profesor Jinhua Li y su equipo, utiliza una interfaz que se coloca en la boca del usuario. A través de una bomba electromagnética, se libera una solución líquida que interactúa con un gel especial, permitiendo ajustar la intensidad y la combinación de sabores. Esto abre la posibilidad de crear experiencias gustativas complejas y personalizadas, adaptadas a diferentes contextos y necesidades.
En pruebas realizadas con humanos, los participantes pudieron distinguir con un 70% de precisión entre diferentes intensidades de sabores ácidos. Este resultado demuestra la efectividad del sistema, aunque los investigadores reconocen que replicar el gusto de manera precisa para todos los usuarios sigue siendo un desafío.
Una de las características más destacadas de e-Taste es su capacidad para transmitir sabores de forma remota, permitiendo a los usuarios experimentar sabores a larga distancia. En un experimento, los participantes pudieron identificar alimentos como limonada, pastel o café, aunque se encontraba a kilómetros de distancia, como en otro estado.
Además de enriquecer la experiencia en juegos y entretenimiento, este avance podría tener importantes aplicaciones en el ámbito de la salud y la inclusión. Personas con discapacidades, como aquellas que han perdido el gusto debido a lesiones cerebrales o COVID persistente, podrían beneficiarse enormemente de esta tecnología.
Los desarrolladores también destacan el potencial de esta tecnología para mejorar la conexión entre usuarios en el metaverso, creando experiencias sensoriales más profundas y realistas. “Este avance representa un paso hacia la integración del gusto en el mundo virtual, lo que abrirá nuevas posibilidades para las experiencias inmersivas”, señala Li.
En resumen, la integración del gusto en la realidad virtual no solo mejora las experiencias interactivas, sino que también abre nuevas fronteras para la investigación sobre cómo el cerebro procesa las señales sensoriales. La tecnología e-Taste podría transformar el futuro de la realidad virtual, permitiendo una conexión más rica y completa entre los usuarios y el entorno digital.
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